El asesinato de Roger Ackroyd
El asesinato de Roger Ackroyd es, a nuestro modo de ver, la mejor novela de Agatha Christie, y lo mismo opinaron en 2013 los más de seiscientos miembros de la Asociación de Escritores de Crimen que la eligieron como la mejor novela de crimen de todos los tiempos.
Este destacado pódium lo podría compartir con Diez Negritos o con Asesinato en el Orient Express, ambas de la misma autora, pero, puestos a elegir, ahí dejamos a El asesinato de Roger Ackroyd en todo lo alto. Tal preferencia viene originada, en su mayor parte, por el sorprendente final, y no les vamos a contar apenas nada más a la espera de que lea el libro y descubra quien es el asesino.
Las obras de Agatha Christie se basan en intrincadas tramas y sorprendentes desenlaces, y no es poco mérito el de atrapar al lector desde la primera hasta la última página. En esto Agatha Chirstie era todo una virtuosa, y con su sencilla narrativa, con un fino sentido del humor, con sus amenos diálogos y con sus personajes singulares se ha convertido en la autora que más novelas ha vendido hasta la fecha. También tiene el récord del espectáculo de teatro más duradero, La ratonera, que se estrenó en 1965 y todavía continúa representándose.
El detective encargado de desentrañar el asesinato de Roger Ackroyd es el singular Hércules Poirot, un belga de escasa estatura, cabeza de huevo, elegantes y puntiagudos bigotes, y que tiene un ego petulante y unas células grises altamente capacitadas. Agatha Christie creo el personaje ya en su primera novela, El misterioso caso de Styles, y volvió a convertirlo en protagonista en treinta y tres novelas más. Todo un largo recorrido narrativo que terminó cuando la novelista dejó de escribir y The New York Times le hizo la correspondiente esquela, siendo el único personaje de ficción en recibir tan fúnebre reconocimiento. La otra protagonista indiscutible de sus novelas es Miss Marple, una agradable ancianita que basa su sabiduría en el conocimiento de la naturaleza humana gracias al cual descubrirá a muchos de los asesinos que se esconden en los apacibles pueblos de la campiña inglesa. Poirot y Miss Marple nunca llegaron a conocerse y es que la escritora intuía que, de haberse conocido, no se habrían llevado demasiado bien.
La vida de Agatha Christie fue relativamente tranquila, y, en cualquier caso, alejada de los crímenes que imaginó. Tuvo una infancia feliz, se casó por amor y se divorció por la infidelidad de su marido, para volverse a casar con un arqueólogo de cuya relación nos regaló la divertida sentencia que dice: “Cásate con un arqueólogo. Cuanto más vieja te hagas más encantadora te encontrará”. Al mencionado arqueólogo, Max Mallowan, le acompañó en muchos de sus viajes al lejano Oriente y a otros exóticos parajes en los que ambientó alguna de sus mejores novelas. El único misterio de su vida llegó cuando, al descubrir la infidelidad de su primer marido, despareció sin dejar rastro durante diez días y toda Inglaterra salió en su búsqueda. La encontraron desorientada en un apartado hotel en el que se había inscrito con el nombre de la amante de su marido, y poco más se supo de la única trama sin resolver de su apacible vida.
CONSEJOS PARA LEER EL ASESINATO DE ROGER ACKROYD
Como ya hemos indicado lo mejor de El asesinato de Roger Ackroyd es su sorprendente final, del cual no vamos, por supuesto, a decir nada. La trama está bien llevada, los personajes son divertidos y los posibles culpables del crimen varios y variados.
Muchas son las novelas recomendables de la autora, entre las que destacamos la mencionada Diez Negritos, tantas veces llevada al cine, y, porque las hemos leído recientemente, El caso de los anónimos, Poirot investiga y Miss Marple y los trece problemas en los que cada capítulo es un misterio por resolver.
Agatha Christie llegó a escribir sesenta y seis novelas policíacas y, entre tanta abundancia seguro que alguna le decepciona como nos ha pasado a nosotros, pero, en general, el nivel de intriga es muy alto.
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